¡Hola a tod@s! ¿Cómo lleváis los primeros días de primavera? Estamos de estreno y, como siempre, cada vez que comienzan a florecer los colores, los olores y los primeros rayos de sol puros del año, llegan las tendencias y los complementos más vistosos. ¡Hay que lucirse!
Voy a daros algunas ideas y os voy a contar cuáles son mis joyas auténticamente indispensables.
Las joyas que nunca me faltan
Sin duda, mi tipo de joyas preferidas son las más sutiles. El “menos es más”, como los anillos finos y elegantes para cualquier ocasión. Aunque el paradigma cambia por completo en lo referente al siguiente indispensable en mi colección: los pendientes grandes, colgantes e incluso “excesivos” (aunque nunca lo son en un sentido real de la palabra, son un placer culpable). Aunque los evito si tengo un día “movidito” para que no puedan entorpecer mi ritmo diario.

Las amatistas. Su color y elegancia son un básico indispensable en mi joyero. ¡Me encantan! También adoro las turmalinas de distintos colores, tienen una asombrosa facilidad para lucir como si se tratara de alta joyería, ayudándonos a resplandecer en cualquier ocasión con menos riesgo a perder o dañar nuestra colección. Son increíbles.
He dejado para el final las pulseras, tanto de muñeca como de tobillo. Llevo muchas, acumuladas (sobre todo en la muñeca) junto a mi otro gran amor de joyería: los relojes. De colores y de mucha personalidad y visibilidad. ¡No puedo estar sin ellos, aunque me vaya a la playa!

El regalo perfecto
Para mí, el regalo perfecto debe estar cargado de simbolismo. Por eso, adoro las pulseras en las que está grabada o añadida en forma de adorno o colgante la inicial de quien la regala. En mi caso, las de mis 3 hijos. Os cuento como anécdota que me regalaron una pulsera personalizada de este estilo, que perdí sin darme cuenta. Es posiblemente la pérdida material que más me ha dolido en toda mi vida. Aconsejo a todo el mundo hacer ese tipo de regalo. ¡Es lo más bonito que hay!
¿Qué significa una joya?
Para mí están cargadas de significado: una joya representa -de forma condensada- los momentos, personas o sentimientos especiales a los que las asociamos. Su capacidad para concentrar todo esto en apenas unos centímetros (o milímetros) en apenas un instante las dota de lo que siento como auténtica magia. Materializa todo esto y lo mejor de nosotros para poder, además, transmitirlo o regalarlo. Son eternas por lo que significan.
Vivid la primavera y el buen tiempo, pero, sobre todo, vivid intensamente y con vuestro estilo a flor de piel. Es el mejor regalo que la vida nos da. ¡Hasta la próxima a tod@s!
