
Para disfrutar de una buena salud emocional tenemos que ser empáticos con nosotros mismos. Aceptarse tal y como somos es el principio para poder hacer frente a todo lo que se presente por delante. Conocerse y comunicarse con nosotros mismos es fundamental para lograr el bienestar personal y así lograr la felicidad. ¿cómo hacerlo?º
- Escúchate y no te critiques.
Cuando te ruborizas, te tensas, explosionas, pierdes la fuerza en el habla, tienes miedo,… estás perdiendo el control. El cuerpo está continuamente mandándote señales de que algo sucede. No lo niegues, reconoce que hay parte de ti que sufre, que siente, que se ilusiona, que se entristece… Obsérvate sin emitir juicios, sin criticar tus experiencias ni emociones, no te castigues, ni te avergüences de cómo te sientes, y tampoco niegues esos sentimientos, de lo contrario no podrás salir de ese bucle de nerviosismo, estrés y de lucha interna.
2. Háblate como si fueras tu mejor amigo.
¿Si no te hablas con respeto a ti mismo, quién lo hará? Para tener una comunicación afectuosa con los demás, primero debes tenerla contigo mismo. Empieza a comprenderte, a tener un diálogo positivo contigo, no tiendas a criticarte, ya que la comunicación contigo de esa manera te desgastará, y se llenará de ruido sin soluciones. Esa falta de autoestima y auto-empatía te alejará de la calma y del equilibrio acercándote al estrés y a la ansiedad.
3. Acepta tus emociones.
Al adentrarte en lo más profundo de tus sentimientos, emergerán emociones que no te gustarán como la ira, el miedo, la rabia, el desprecio u otros que te incomodarán, puede que te hagan mirar hacia otra parte, pero hay que hacer lo contrario, y coger el toro por los cuernos para detectar qué nos está pasando, y así neutralizarlo. Trata de realizar este ejercicio cada vez que te surja un sentimiento desagradable, di algo como: “ Me siento (añade como te sientes, triste, enfadado…) Está bien sentirse así, no tengo porqué rechazar estos sentimientos. Voy a descubrir que información me traen”. Todos los sentimientos traen una información útil, si sabes escucharlos y entenderlos sin juzgarlos, conseguirás estar en paz contigo mismo.
4. Acéptate tal y como eres.
Para empezar a aceptarte debes saber que las emociones no son buenas ni malas, luchar contra ellas solo harán que les des más protagonismo, reforzarlas y aferrarte a ellas. Para que no te suceda, hay que tener un diálogo interno sin criticarte, sin dañarte o castigarte, ya que entrar en juicios contigo mismo sería participar de un círculo vicioso que termina dañando tu potencial que te hará sentir mal. La meditación o el mindfulness es un excelente ejercicio para aprender a identificar nuestros pensamientos sin reaccionar ante ellos ni juzgarlos.
5. Perdónate y se amable contigo.
Para pasar página es fundamental sentirse liberado y sentirse pleno y gozar del bienestar, y para conseguirlo tienes que reconocer los errores sin ser demasiado severo contigo mismo. No te castigues, despréndete de tu ego sancionador. Tampoco magnifiques el error de tal manera que lo asumas como imperdonable, ni te culpabilices por un fallo cometido. Sé comprensivo y amable contigo, muéstrate compasivo y reconoce tu error con humildad. Recuerda que todos los cometemos y eso está bien, lo importante es darse cuenta. Date una oportunidad, tienes derecho a caerte y levantarte, a tomar decisiones equivocadas y aprender de ellas. Tus errores no te definen, lo hace la actitud que tomas ante ellos.
La empatía es una de las clave para sentirse bien con uno mismo, y todos la desarrollamos, unos más que otros, y eso se manifiesta en cómo cada uno afronta los problemas de la vida, ese desafío continuo que nos pone a prueba, donde el éxito de superación radica en mantener la calma, controlar el estrés y la ansiedad y sobretodo no apartar la mirada del reto.